Conflicto y convivencia

(Actividad 16)


El conflicto y la convivencia son dos realidades sociales inherentes a toda forma de vida en sociedad. Convivir significa vivir unos con otros sobre la base de unas determinadas relaciones sociales y unos códigos valorativos en el marco de un contexto social determinado. A su vez, esos códigos determinan que el tipo de convivencia está potencialmente conectado con las relaciones de conflicto, que tienen su mella significativa en tanto en cuanto suponen una amenaza para esa convivencia. Si esto lo trasladamos al ámbito del aula, podemos decir que a veces al profesor le tocará lidiar con la parte más desagradable de su profesión, la de gestionar conflictos y otro tipo de faltas dentro de la clase.

Aunque destaquemos al profesor, en sí misma, es una tarea propia de todo el equipo docente, tanto de los tutores, como del equipo directivo e incluso de los propios alumnos, los cuales pueden participar en la gestión de estos conflictos a través de los programas de mediación que están insertos, hoy en día, en muchos de los Reglamentos de Régimen Interior de los centros. Prueba de ello es, por ejemplo, el propio Reglamento de Régimen Interior del I.E.S. León Felipe, que ya nombramos en otra entrada del blog. En el mismo se concretan las disposiciones a efectuar en el marco de la mediación y de los procesos reeducativos que surgen a partir de los conflictos en el aula.

Si alguien conoce perfectamente este tipo de conflictos y las resoluciones a llevar a cabo para solventarlos es Xexús Jares, un profesional de la educación que en su obra Conflicto y convivencia en los centros educativos de Secundaria marca las pautas y medidas de cara a la resolución de conflictos en los centros de educación secundaria. Podemos resumirlas en las siguientes:

1.       Crear espacios de convivencia

2.       Participación de los diferentes sectores para mejorar la convivencia

3.       Participación de los diferentes órganos de los centros para favorecer la convivencia positiva

4.       Uso de estrategias didácticas, sirviéndose del uso de las tutorías como espacio habitual donde los alumnos resuelven conflictos

5.       Dar a conocer al alumnado la normativa interna del centro

6.       Valorar de forma positiva la importancia de la mediación para el buen funcionamiento del centro




A partir de aquí podemos tratar de concretar algunas medidas a llevar a cabo respecto a conflictos que habitual o esporádicamente se manifiestan en las aulas. De esta manera, presentamos aquí 5 conflictos-tipo y algunas medidas que podríamos proponer a partir de tales situaciones:

 1. Incumplimiento del deber de estudio durante el desarrollo de la clase: mandar un trabajo/resumen de la lección no escuchada/la tarea no realizada.

2. Uso indebido del móvil en clase: primero un aviso verbal. Si no cesa la transgresión, se establecerá una sanción más dura (“el parte”) y el acudir a la dirección o a la jefatura de estudios

3. Bullying a un compañero: primeramente, se llevará a los involucrados a hablar con el orientador y analizar la situación. En segundo lugar, se establecerá de nuevo la sanción del parte y se tomarán medidas desde el centro. Por último, se comunicará la situación a los padres para coordinar las medidas que deban tomarse.

4. Llegar tarde a clase: tomar nota de los que llegan tarde y, a las tres faltas, poner un parte.

5. Pequeños hurtos y robos leves: sanción (parte) y notificación a los padres.

 

Enlaces de interés:

https://evanovoro.wordpress.com/2014/10/04/posibles-conflictos-y-posibles-soluciones-en-un-aula/

https://dialnet.unirioja.es/servlet/autor?codigo=18646

https://www.youtube.com/watch?v=K79UQYxGqkE

 

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